Misión
Nuestra comunidad es un grupo de jóvenes al servicio de Dios que, conociendo su palabra, transmiten y proclaman su amor con la firme convicción que Jesús ha resucitado, y así extender su Reino, dando un verdadero testimonio de que ÉL VIVE.
Visión
El Movimiento Juvenil Católico ÉL VIVE, sigue con los lineamientos de la nueva evangelización, está en constante expansión, cuenta con la infraestructura necesaria, y forma líderes cristianos comprometidos.
Fundamentación Teológica de ÉL VIVE
La fundamentación teológica de ÉL VIVE tiene su fuente en la Cristología Paulina "Ya no soy yo quien vive en mi, si no es Cristo Jesús quien vive en mí" Gal. 2. 20; "Hasta ver a Cristo formado en ustedes" Gal 4, 19.
Y en la Eclesiología de los Hechos de los Apóstoles en donde las comunidades se forman y viven por, con y en "El Resucitado" Hch, 2. 24.32; "No esta aquí ¡ha resucitado!" Lc. 24. 6 .
"Yo estaré con ustedes todos los días hasta el fin del mundo" Mt. 28. 20.
Este Movimiento Juvenil Católico pretende poner al joven en contacto directo con El Evangelio, para descubrir a Cristo en el acontecer de su vida, al modo de San Pablo; "¿Quién eres tú, Señor? Y él respondió: Yo soy Jesús, a quien tú persigues". Hch. 9. 5
ES MOVIMIENTO, por que no pretende formar grupos, si no que el joven cristiano viva como apóstol en su ambiente familiar, social y parroquial.
ES JUVENIL, ya que esta hecho por y para jóvenes, con singulares métodos, propios de su edad, como lo pide la Nueva Evangelización.
ES CATÓLICO, puesto que es eminentemente eclesial en su teología, en su espiritualidad y en su apostolado. La finalidad es que el joven viva a Cristo en el misterio y estructura de la Iglesia, en su propio ambiente.
Fundado en 1996 ÉL VIVE, sigue renovándose cada día para responder a los cambiantes tiempos fantásticos y dramáticos de nuestro mundo actual.
Concientes de que la obra es de Jesús hacemos nuestras las palabras del Papa Juan Pablo II "Quédate con nosotros Señor… bendice a los jóvenes… ilumina nuestra fe con tu palabra, alimenta nuestro caminar con tu Eucaristía, ¡Señor Jesús, quédate con nosotros!"
Finalmente ponemos a ÉL VIVE en manos de nuestra Madre María y le pedimos por su amorosa intercesión, que sea siempre para la Gloria del Padre Celestial, con el fin de que su hijo Jesucristo viva con nosotros y nos envíe la luz santificadora de su santo espíritu. Amen.